Eruca Sativa: celebrando la hermandad y la música colectiva

En la antesala de su esperado concierto junto a Kuervos del Sur, tuvimos el privilegio de sumergirnos en una conversación íntima con Eruca Sativa. Nos encontramos en un salón del Hotel Sheraton, donde entre risas y mientras compartimos un delicioso mate, exploramos el universo de esta emblemática banda argentina. Con 17 años de trayectoria, Eruca Sativa ha no sólo consolidado su posición en la escena musical latinoamericana, sino que ha sido una voz resonante en la búsqueda de la hermandad y la conexión a través de la música.

Eruca Sativa, formada por Lula Bertoldi (voz y guitarra), Brenda Martin (bajo) y Gabriel Pedernera (batería), ha alcanzado reconocimiento no solo por su habilidad técnica y energía en el escenario, sino también por su compromiso con temas sociales y la autenticidad artística. Originarios de Córdoba, Argentina, el trío ha trascendido fronteras con su fusión única de rock, grunge y elementos alternativos, ganándose el corazón de audiencias en toda América Latina.

Durante nuestra conversación, profundizamos en los hitos de la banda a lo largo de los años y las experiencias que han moldeado su identidad musical. Desde sus primeros días tocando en pequeños clubes locales hasta llenar estadios y festivales de renombre, Eruca Sativa ha mantenido una conexión profunda con su público, reflejada en cada acorde y cada letra de sus canciones.

– Chicos, están de regreso en Chile ya con un país que los ha acogido con una fuerza y una energía muy grande. Ahora en esta ocasión vienen a acompañar a Los Kuervos del Sur en el aniversario de su disco “Porvenir”. ¿Cómo se sienten con esta invitación y ser parte de esta celebración?
– LB: Bueno, felices y además recuperando el tiempo perdido porque nos quedamos sin un show con Los Cuervos en el Caupolicán antes de la pandemia, que se dio de baja por motivos obvios. Y bueno, nos quedamos ahí con la vena de que íbamos a hacer un tremendo show todos juntos. Ellos lo terminaron haciendo después distinto, reformulado y nosotros no pudimos venir, pero es medio la revancha, digamos de aquella vez.
– BM: Qué lindo que lo digas así, se sintió muy bien. Gracias.

– A lo largo del tiempo, hemos visto cómo han cautivado al público en Chile, no solo por su humildad y la forma en que se entregan completamente a sus fans, sino también por la diversidad de sonidos que han logrado. Con 17 años de trayectoria, han lanzado 6 discos de estudio y 3 discos en vivo, siendo el último lanzado el año pasado y aún en promoción. ¿Cómo se sienten cada vez que se suben al escenario y reciben todo este amor y energía del público?
– GP:  Mirá, dijiste lo de la humildad. Somos la banda más humilde del mundo. Humildemente lo digo. Hay un certificado que nos mandaron de Guinness… De la cerveza Guinness. (Risas) No, la verdad que muy bien. Nos gusta mucho venir a Chile, siempre decimos lo mismo, demoramos mucho en venir, demoramos 10 años porque una cosa, porque la otra, porque no se podía, y en el momento que se dio fue mucho más fuerte de lo que lo imaginábamos porque la gente cantaba nuestras canciones. Había una energía en el lugar que fue increíble, en La Batuta ese primer día, creo que fue 2017, fue como pocas veces. Decir, ¿cómo no habíamos venido antes? ¿Cómo no vinimos antes? Y a partir de ese momento fue como, bueno, veamos la forma. Por suerte ahora este año se está pudiendo dar. Que vinimos a fin del año pasado, estamos viniendo ahora y volvemos a venir en diciembre.

– Se están recuperando por todas las que no vinieron.
– GP: Exacto. Y comemos todo el pescado que no comimos en esos 10 años. Entonces es como muy hermoso porque la música genera algo, genera una conexión, es un idioma de por sí solo y genera una conexión entre las personas que es increíble, entonces queremos aprovechar de eso. Nosotros disfrutamos mucho de estar juntos, de seguir juntos después de tantos años, de poder levantarnos todos los días y saber que vamos a estar haciendo lo que sea juntos y lo vamos a disfrutar y el momento de tocar sabiendo que el público va el público va a ser tan cálido como el público chileno, es hermoso.

– Bueno, como mencionaba, una de las cosas que más llama la atención de ustedes es la versatilidad para jugar con los sonidos y diferentes estilos. Sus composiciones abarcan una variedad de melodías. ¿Cómo es su proceso creativo y cuáles son sus influencias? Esto los ha llevado a trabajar y colaborar con grandes artistas de la escena en español, muchos de los cuales supongo fueron influencias para ustedes. ¿Cómo se siente lograr todos estos pequeños hitos?
-BM: Estamos muy agradecidos con las personas que nos han inspirado y con quienes hemos tenido el privilegio de compartir escenario y grabaciones, como Pedro Aznar, David León y León Gieco, quienes son grandes referentes para nosotros. También hemos tenido la oportunidad de colaborar con artistas como Fito Páez, Fabiana Cantilo y Hilda Lizarazu, quienes han mostrado una generosidad tremenda al acompañarnos en nuestros shows. Además, disfrutamos mucho colaborar con artistas de las nuevas generaciones, de quienes siempre aprendemos mucho. Esta experiencia nos ha enriquecido porque amamos la música y cómo nos conecta con nuestras emociones y con el mundo que nos rodea. Para nosotros, la música es más que una profesión; es una forma de vivir en conexión con el planeta y con quienes nos rodean. El camino no siempre es fácil, pero valoramos enormemente la oportunidad de encontrarnos con personas en el momento y lugar adecuados, con quienes compartimos el deseo de crear un espacio de libertad y expresión en nuestro trabajo musical. En la banda, cada uno puede tocar lo que ama y decir lo que siente, sin imposiciones externas. Es un proceso de compañerismo y aprendizaje mutuo, donde buscamos un camino común más allá de nuestras individualidades.

La música tiene un impacto profundo en nuestras vidas, no solo como artistas, sino también como seres humanos. Es gratificante ver cómo nuestra música conecta con otros, generando energía positiva y momentos memorables para quienes nos escuchan. Nos llena de amor y nos devuelve amor de vuelta, creando experiencias que son verdaderamente hermosas y significativas para todos nosotros.

– GP: Como dice Brenda es un privilegio muy grande hacer lo que hacemos. La verdad es que creo que a cualquier persona le encantaría si le ofrecen che podes hacer lo que amás, todos los días de tu vida, viajar con las personas que más querés, con tus amigos, pasarla bien, disfrutar, no sé, como que es el mejor trabajo del mundo si se puede llamar trabajo.

– Bueno, como mencionabas, próximamente estarán de regreso a finales de año promocionando su último disco en vivo y presentando un espectáculo completo. Pero, ¿cuáles son los próximos pasos para Lucas Ativa? Después de alcanzar tantos logros en estos 17 años y explorar tantas oportunidades, ¿qué objetivos les quedan por cumplir? ¿Hay algo específico que aún quieran lograr o algo que ya estén planeando para el futuro?
– LB: Estamos realmente satisfechos con todo lo que hemos logrado con la banda. No le pido más a la banda ni al futuro en este momento. Creo que la clave está en disfrutar de lo que estamos haciendo ahora, con un compromiso y responsabilidad, sabiendo que tenemos un lugar muy especial donde podemos ser escuchados. Valoramos enormemente esta oportunidad, ya que muchos no tienen la misma suerte. Actualmente, estamos trabajando en canciones nuevas y nos preparamos para grabar un nuevo disco. Esa es la próxima meta concreta que veo a corto plazo. Una vez que tengamos el disco en nuestras manos, se abrirá una nueva etapa para nosotros. Es como un renacer, porque significa crear música nueva y seguir adelante.

– ¿Les gusta vivir el presente?
– BM: No es que nos guste, es que es la etapa de la banda ahora (risas)
– LB: En estos 16 años juntos, hemos pasado por numerosas etapas, casi todo lo que podríamos haber imaginado. Una lección importante que hemos aprendido es vivir el presente intensamente, porque nadie sabe qué deparará el mañana. La pandemia y otros momentos difíciles como banda nos han recordado la importancia de apreciar el momento presente. Estamos disfrutando de lo que hacemos con amor y respeto hacia nosotros mismos y hacia la música, y eso es algo invaluable. Más que esperar a que sucedan cosas, preferimos saborear cada instante que vivimos.
– GP: Brenda tiene razón en que cada momento es como un nuevo comienzo, un regalo que la vida nos da sin pedir nada a cambio. Personalmente, lo veo como una lección de vida. Por ejemplo, con mi hija de cuatro años, ella puede ver un simple vaso y emocionarse, ¡es un vaso! Es hermoso ver ese nivel de asombro por todo. Esta mañana, mientras tomaba café, pensé en lo maravilloso que es valorar cada pequeño momento, al igual que cada canción que creamos. Estamos emocionados porque pronto grabaremos un nuevo disco, y creo que es algo realmente bueno y emocionante.
– LB: Sí, además en nuestro país estamos viviendo una situación súper crítica, horrible, con presos políticos de nuevo. Otra vez hay gente presa en democracia por manifestarse. Contexto tan horrible de un gobierno déspota y violento y censurador en nombre de la democracia y la libertad, de la falsa democracia y la falsa libertad, hacer lo que uno ama con sincera libertad y con sincera honestidad es muchísimo poder hacerlo todos los días. O sea que realmente somos unos privilegiados más en un contexto social tan grave como el que está viviendo nuestro país. Así que más agradecidos y con más responsabilidad subimos al escenario a decir lo que pensamos. Esto nos ha permitido conectar profundamente con el pueblo chileno y sudamericano en general, ya que hemos compartido experiencias similares y nos hemos apoyado mutuamente.

– A pesar de las bromas recurrentes sobre el fútbol y otras cosas, en el fondo siempre nos hemos sentido como hermanos. Con esto en mente, ¿qué mensaje les gustaría enviar a sus fans sudamericanos e hispanohablantes en general para concluir?
– BM: Bueno, eso que decís vos de que somos hermanos, ¿no? Somos hermanos en la tierra y también en este lenguaje que es la música. Eso me llega. Eruca está acá para acompañar, para bancar, para escuchar y también para aprender y estar ahí en contacto y creciendo. Creo que como sociedad tenemos que ir por ese lado, por lo colectivo, no tratando de lograr las cosas solamente para uno mismo. Aunque sea algo chiquito, como decir, escribir una canción pensando en lo que está pasando con mi hermana, o inspirarme en la música de un artista que conmovió a tanta gente. Hay muchas formas, ¿viste?

Pero claro, nada parece importante hasta que nos damos cuenta de que todo lo es, siempre y cuando sepamos resistir al individualismo y al consumismo que se veía venir hace décadas. Me acuerdo cuando era chico y decían que la globalización y el capitalismo iban a traer más individualismo y masificación. Y ahora lo estamos viendo en la práctica, ¿no? Cuesta encontrar bandas hoy en día, son todos solistas, es todo medio raro. Pero en fin, no hay que generalizar, supongo. Pero en general, me parece que se pierde esa conexión con lo verdaderamente importante, ¿sabés? Con la naturaleza y esas cosas, porque estamos más enfocados en el consumismo y en sobrevivir cada mes y creo que mi mensaje es muy largo (risas)

– LB: Bueno, seguimos en la misma, ¿no? Es como que hemos tenido la suerte y el privilegio de viajar mucho por Latinoamérica y todavía nos falta mucho por conocer. En esos viajes uno se da cuenta de que, en el fondo, todos atravesamos por experiencias similares: luchas, dictaduras, y la constante lucha por salir adelante y enfrentar nuevas situaciones difíciles. Es desalentador, pero sabemos que nuestra trinchera es la música, el cooperativismo, la hermandad, lo colectivo, el pueblo. Nos aferramos a estas cosas nosotros, los artistas, ¿no? A la cultura, a otros artistas, al pueblo, a la gente, a las voces que se escuchan en las calles. Así que, bueno, en eso estamos.
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Fuente: ROCKAXIS